Degustando el amor
Un tenue brillo
con aroma a café,
ilumina
el amanecer,
con aroma
de caricias
serenas ,
se descubren
los deseos
de un infinito
letargo,
ese que se cobijó
en cartas amarillas,
en la ceniza ,
de una cabellera
que algún día
pintaba azabache;
Una mirada
como antaño
fue,
encendió
la pasión
que creía extinta ;
Y ahí
te descubrí ,
con una camisa,
que no te pertenecía
y yo conocía,
un par de medias cambiadas,
una taza
humeante
en una de tus manos,
mientras la otra
se extendía ,
para rozar mi mejilla,
observándome
con aquel cariño
que pensaba que no existía;
un tenue brillo
con aroma a café,
y con sabor
...a amor...
Un poema lleno de luz y ternura. Que bonito!! Besos
ResponderEliminarHola HAF, abrazo de luz a tu noble corazón.
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