Entrega...
Y percibí , su cálida mirada, atravesar tiempos, llevando luz a la mas oscura nocturnidad, con el alma extendida, para resguardar el único rayo de luz, como si atrapara la mismísima esperanza; Un extenso suspiro vació sus pulmones, atestados de sueños, tornándolos realidades, aquellas inexplicables; Su boca se entrego a los besos, sanando su mas hondo pesar, emergiendo desde su mas débil latido, un suspiro atestado de silencios, los que gritaba en la inmensidad de la soledad; Las caricias brotan a raudales, donde su vientre se desnuda, y el corazón palpitante, late en la palma de su mano, ...ofreciéndose, sin condiciones...