Tiempo
Tenia la vida
colmada de días,
y el tiempo
era escaso;
Su mirada
se velaba,
y su pelo
se encanecía,
con un andar,
casi imperceptible,
por el curtiente
otoño de su vida...
colmada de días,
y el tiempo
era escaso;
Su mirada
se velaba,
y su pelo
se encanecía,
con un andar,
casi imperceptible,
por el curtiente
otoño de su vida...
La soledad se advierte en la mirada y sobre su pelo encanecido, la ilusión queda seca como las hojas de otoño que sin rumbo fijo el viento las lleva.
ResponderEliminarUn cálido abrazo
Bellas palabras
EliminarUn beso
Profundas letras que tanto dice de la vida. besos
ResponderEliminarEl dolor traspasa hasta al lector.Nada fácil hacer sentires. Buenísimo!
ResponderEliminar