Suspiros
Los labios
mecían las palabras
que su corazón
dejaban fluir,
de una piel
seducida por mil caricias,
y con la melodía
de un susurro,
se adormecía la mirada
en el lecho
de un horizonte
casi tangible
mecían las palabras
que su corazón
dejaban fluir,
de una piel
seducida por mil caricias,
y con la melodía
de un susurro,
se adormecía la mirada
en el lecho
de un horizonte
casi tangible
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