MAGNO

E n tu dulce boca, ahogué mis besos, para darle desahucio a mi soledad, desprendí la piel de mis caricias, extinguiendo el silencio, y cegué mis ganas embriagando mi alma de ti...

Cual es la distancia que separa,tu sentir de mis deseos de amar, que mide la fuerza de la tenacidad de un "te quiero", que caricia dormita sobre la piel que gime, cual es el beso que mas se extraña en silencio, cual es la mirada que perdura en el tiempo, cual es el verso que inspira a decirlo todo, cual es la mano que no se tiende para estar con la soledad; Cual es la distancia que separa tu sentir, de mis deseos de amar, cual es la palabra que debo pronunciar ...para quebrar tu silencio...

Se me hicieron silencios todas las palabras de tu ausencia, se me hizo soledad el recuerdo de tu piel...

Ecos ensortijados en un mundo de recuerdos, olvidos haciendo memoria de caricias inexistentes, un verbo conjugado mil veces impregnando la piel, labios extrañando besos carmín, y una mirada al infinito, ...que te busca...

La audaz lagrima, recorrió tu mejilla, delineando el dolor hasta el pecho, donde se encendía el purpura de los recuerdos, esos que cada vez que la memoria recorría, desprendían la piel de las caricias, las que se ocultaron para un después, un después indefinido por los sentires; La audaz lagrima, recorrió tu mejilla, y cinceló mi destierro... de tu corazón...

la vida se estampa, en un segundo, en un puñado de letras, pero se vive en una eternidad, y no se vive mas de lo que se debe, solo lo que se quiere, el resto se transita sin prisa, hasta encontrar algo, por lo que merezca vivir...

La brisa del amanecer se impregna de tu desvelo, el sol se instala en tu sonrisa, el rocío se refresca en tus caricias, mis ojos se endulzan con el néctar de tu belleza, mis labios se embriagan de tus besos, y mis manos se llenan de recuerdos ...para otro atardecer... H.A.F. © Borbála Zergi

El extrañarte se convirtió en una pena, que húmeda rodó por mi mejilla punzándome el pecho, mis caricias se desprenden de estas manos, casi extintas de memoria; mis labios ajados, les faltan beber de tus besos, esos a los que me acostumbraste, y que tanto añoro; mi mirada perdida de tanto buscarte, y verte por doquier, sin poder alcanzarte; el amanecer me habla de ti, mostrándome la luz radiante que asemeja a tu sonrisa, y el perfume de las rosas tempranas con un toque de jazmín , casi como huele tu presencia , el atardecer clava el puñal , desangrando mis recuerdos, y la noche no los deja ser olvidos; El extrañarte se convirtió en una pena, ...pero solo mía

He vivido mil vidas, mas solo recuerdo una, la que me desprendió la piel desde el alma; He vivido mil vidas, solo la de tus besos, que impregnaron mis nostálgicos labios, embriagándolos de dulce locura; He vivido mil vidas, y acaricié mil sabores, pero mis manos solo perciben la suavidad de tu piel, hasta en su ausencia; He vivido mil vidas, observando paisajes, y tan solo tengo grabado, el esplendor de tu sonrisa; He vivido mil vidas ...pero ninguna como la tuya

Porque el sol al ocultarse desangra en atardecer, porque la flor marchita aún conserva su perfume, porque la belleza de la noche es mas bella en soledad y silencio, porque el amanecer es una daga para amantes, y un estallido musical para el trinar de las aves, porque mis besos que navegan tu boca, desprenden mi pecho, porque mis caricias recorren tu piel, y el recuerdo se queda en la memoria tactil de mis manos, porque mis ojos pierden la mirada , en el infinito horizonte, recordando tu sonrisa, porque mi sentir palpita en tu voz ...si no estas conmigo, será que estas en mi?

Tu piel florece trigo nuevo, su espiga dorada, se mece en la suave brisa, de una caricia furtiva, con ansias de ser eterna; Tu piel emana perfume de primaveras pasadas, esas que no se olvidan , floreciendo hasta en el mas crudo invierno; tu piel me recuerda ...hasta en su ausencia

Si tuviese... Si tuviese una explicación para las palabras que no he dicho, si tuviese que mostrarte todo lo que no vi, si tuviese que sentir las caricias guardadas en la sombra del silencio, si tuvieses que entender las lágrimas en soledad, esas que latieron por el amor que desgarró mi pecho; Si tuviese una explicación para las palabras que no he dicho, mis besos no naufragarían en labios a la deriva...