Un tenue brillo con aroma a café, ilumina el amanecer, con aroma de caricias serenas , se descubren los deseos de un infinito letargo, ese que se cobijó en cartas amarillas, en la ceniza , de una cabellera que algún día pintaba azabache; Una mirada como antaño fue, encendió la pasión que creía extinta ; Y ahí te descubrí , con una camisa, que no te pertenecía y yo conocía, un par de medias cambiadas, una taza humeante en una de tus manos, mientras la otra se extendía , para rozar mi mejilla, observándome con aquel cariño que pensaba que no existía; un tenue brillo con aroma a café, y con sabor ...a amor...
bien ahí, este poema micro mini me encanta, hace pensar, la imagen es bellísima
ResponderEliminaraplaudo el cambio, beso
esos ojos me llevaron a otros tiempos,la nostalgia mía,es irremediable
ResponderEliminarun beso
Me gustó tantísimo, y esta sensación que no abandona de beso, de miradas con el alma... qué dicha leerte.
ResponderEliminarAbrazos!
gracias elizabeth,la dicha es mia,por tomarte el tiempo de visitarme
Eliminarun beso